
En invierno, las manos están expuestas a cambios de temperatura bruscos (calefacción y el frío de la calle), alterando los niveles de hidratación y nutrición de la piel.
¿Qué efecto tiene el frío en las manos? ¿Hay más factores que estropeen las manos?
El frío actúa contrayendo los vasos sanguíneos bajo nuestra piel, y así logra mantener el calor en su interior. Pero al reducirse la circulación sanguínea, se recibe menos oxígeno y nutrientes. Por tanto, disminuye la barrera de autoprotección de la piel haciendo que la piel se vuelva áspera, seca y tienda a agrietarse. Sigue leyendo ¿Manos más secas y agrietadas en invierno?